Margarita Morais, presidenta de la Fundación Eutherpe, es premio Castilla y León a los Valores Humanos y Sociales. Ayer fue designada y así se lo comunicó, primero, Gonzalo Santonja, consejero de Cultura de la Junta de Castilla y León, y, después, Alfonso Fernández Mañueco, presidente de la Junta. «No me lo esperaba. No sabía ni que se empezaban a entregar. Me pilló trabajando. Eso sí, ha sido una sorpresa que me ha hecho mucha ilusión», aseguraba tras conocer el premio. El jurado ha estado integrado en esta edición por Miguel Pérez Cabezas, presidente de Camino Francés Federación (CFF), entidad galardonada con el Premio Castilla y León de los Valores Humanos y Sociales en su edición de 2022; Miguel Ángel González González (OCD), prior de Alba de Tormes y de Salamanca, y director del Museo Carmus; y Joaquín Sánchez Torné, director de Diario de León.
Igualmente han formado parte Gregoria Cavero Domínguez, catedrática de Historia Medieval de la Universidad de León; José Antonio Fernández Flórez, catedrático emérito de Paleografía y Diplomática de la Universidad de Burgos; y como secretario, Alfredo Stampa Santiago.
La presidenta de Eutherpe es desde la capital leonesa la gran dinamizadora de la música clásica y una generadora de talento joven que tiene su oportunidad tanto en los conciertos de la fundación como en los cursos y ciclos que organiza. Así que a partir de ahora, su labor será realzada por la propia repercusión de los premios.
Nacida en 1945 en Cantabria, Margarita Morais llegó a León en 1976 para dar clase de música en las Carmelitas y aquí se instaló definitivamente. Pero aseguraba ayer a este periódico: «De León no me he movido ni me muevo. Ha habido ofertas pero en León soy feliz», garantiza.
Cuenta que llegó a Eutherpe y toda la actividad que lleva a cabo (90 conciertos, por ejemplo, en 2023) sin saber ciertamente lo que pasaba: «Era un mundo que desconocía por dentro. Pero pronto me di cuenta de que tenía una necesidad clara: todos me decían, me pedían, casi, un lugar para actuar», relata.
Así comenzó lo que en León y Castilla y León, pero también en España y fuera, santo y seña de la música clásica en directo, a donde vienen a tocar artistas de todo Europa, sobre todo emergentes, que encuentran el lugar para expresarse que no tienen en ningún sitio.
Todo comenzó en un trastero. Margarita Morais no es el genio informático Steve Jobs, que inició su carrera en un garaje, pero la actual presidenta de la Fundación Eutherpe tuvo la idea de habilitar una sala para dar una oportunidad a jóvenes músicos. El proyecto arrancó con un piano de 1820, que aún se utiliza, y perteneció a la bisabuela de Morais, Amalia Martínez de Velasco y Bustamante. La sala ha albergado más de 3.000 conciertos, entre recitales de piano, canto y música de cámara en todas sus versiones. Por esta estancia de las Carmelitas en Alfonso V han pasado intérpretes procedentes de 51 países. «Solo les pedimos tres requisitos: una foto, su currículum y el programa que van a interpretar», cuenta Morais. Al principio era ella quien sacaba fotos de los recitales. Hasta que un día «pesqué en Facebook a María Díez, una asidua a los conciertos, que hacía espléndidas fotografías». Ahora, en reconocimiento a su labor y dedicación, Morais va a ser merecidamente condecorada con este premio Castilla y León a los Valores Humanos y Sociales.
Dicen que Morais levanta el teléfono y la gente coge un avión para actuar en León gratis. La fundación que preside cumple este año sus primeros 25 años. Un tiempo en el que Morais no ha estado quieta. Creo los cursos internacionales que en verano traen a León a una legión de pianistas y directores de orquesta, que tendrán la oportunidad de perfeccionar su técnica junto a los maestros Bruno Aprea y Joaquín Soriano. También creo el ciclo Maestros Internacionales que permite escuchar en el Auditorio Ciudad de León a jóvenes virtuosos que están llamados a ocupar un lugar destacado en el firmamento musical. También creó en 2014 la Joven Orquesta Leonesa (JOL), una prueba de fuego para músicos que buscan experiencia en una formación sinfónica.
En estos momentos, forman parte de la JOL 175 músicos, que periódicamente se reúnen para ensayar y a los que Eutherpe financia la residencia. A Margarita, que ha recibido numerosos premios y reconocimientos, no le avergüenza pedir dinero públicamente. Todo por el bien de la música. Por los jóvenes músicos.
También es clara y transparente con las subvenciones que reciben: 10.000 euros al año del Ayuntamiento y 18.000 del Ministerio de Cultura, a través del Instituto Nacional de las Artes y de la Música (Inaem). El Ayuntamiento cede gratuitamente el Auditorio para los doce conciertos del ciclo de Maestros Internacionales, a los que pagan con la recaudación íntegra de la taquilla. El año pasado animó a hacerse mecenas por solo 25 euros año de la función -por la que han desfilado desde su creación más de 7.000 músicos-.